Imagina el aroma fresco de los tomates maduros combinado con hierbas y especias. ¡Así es como se hace una deliciosa salsa de tomate natural en casa!
Los ingredientes esenciales
Para preparar esta salsa, necesitarás tomates maduros, cebolla, ajos, aceite de oliva, sal, pimienta y hierbas frescas como albahaca o orégano.
La importancia de elegir los tomates adecuados
Los tomates jugosos y maduros son clave para una salsa de tomate sabrosa. Opta por tomates de calidad para garantizar un mejor resultado.
Instrucciones paso a paso
- 1. Lava los tomates: Elimina la suciedad y los residuos de los tomates lavándolos bajo agua corriente.
- 2. Corta y pela los tomates: Retira los tallos y haz una incisión en la base de cada tomate para facilitar el pelado. Sumérgelos en agua hirviendo y luego en agua helada para pelarlos.
- 3. Prepara las verduras: Pica finamente la cebolla y los ajos.
- 4. Cocción inicial: En una olla grande, calienta el aceite de oliva y sofríe la cebolla y el ajo hasta que estén dorados.
- 5. Agrega los tomates: Corta los tomates pelados en trozos y agrégalos a la olla. Cocina a fuego lento hasta que se ablanden.
- 6. Condimenta: Añade sal, pimienta y las hierbas frescas picadas. Deja que la salsa se cocine a fuego lento para que los sabores se mezclen adecuadamente.
- 7. Tritura la salsa: Utiliza una licuadora o procesador de alimentos para triturar la salsa hasta obtener la consistencia deseada.
- 8. Sabor final: Prueba la salsa y ajusta la sazón si es necesario. ¡Tu salsa de tomate natural está lista para servir!
¿Qué hacer con la salsa de tomate?
Esta salsa es versátil y puede ser la base de una variedad de platos. Agrégala a tu pasta favorita, úsala como base para pizzas caseras o como salsa para acompañar carnes y pescados.
Preparar una salsa de tomate natural en casa es una forma deliciosa de añadir sabor a tus comidas. Experimenta con diferentes hierbas y especias para personalizar la receta según tus gustos.
¿Se puede congelar la salsa de tomate?
Sí, puedes congelar la salsa de tomate en recipientes herméticos para conservarla por más tiempo. Solo asegúrate de descongelarla completamente antes de usarla.
¿Cómo almacenar la salsa de tomate sobrante?
Si te sobra salsa, guárdala en un recipiente hermético en el refrigerador y consúmela dentro de unos días para mantener su frescura.