Si eres un amante de los postres sencillos, deliciosos y fáciles de hacer, esta receta de tarta de queso con solo 3 ingredientes, donde la leche condensada juega un papel estelar, te sorprenderá. Con un resultado cremoso y sabroso, esta tarta se convertirá en tu favorita en poco tiempo.
El Secreto de la Leche Condensada
La leche condensada es el ingrediente mágico que hace que esta receta sea tan especial. Su consistencia espesa y su dulzura aportan una textura única y un sabor irresistible a la tarta de queso. Al elegir una buena calidad de leche condensada, como la versión entera y no light, garantizas un postre más cremoso y sabroso.
Ingredientes Necesarios
Para la Base:
- Galletas Digestivas: La base de la tarta se prepara con galletas Digestivas trituradas que aportan un contraste crujiente y equilibran la cremosidad del relleno.
- Mantequilla: Es importante utilizar mantequilla derretida para unir las galletas trituradas y formar una base firme y sabrosa.
Para el Relleno:
- Leche Condensada: El ingrediente principal y estrella de la receta que da cremosidad y dulzura a la tarta.
- Queso Crema: Aporta la textura suave y el sabor característico de una clásica tarta de queso, combinado perfectamente con la leche condensada.
- Huevos: Ayudan a mantener la estructura de la tarta y a que se cocine de manera uniforme.
Procedimiento paso a paso
Paso 1: Preparación de la Base
En un bol, mezcla las galletas Digestivas trituradas con la mantequilla derretida hasta obtener una textura arenosa. Coloca esta mezcla en el fondo de un molde desmontable y presiona firmemente para formar la base. Refrigera mientras preparas el relleno.
Paso 2: Preparación del Relleno
En otro bol, mezcla la leche condensada con el queso crema hasta obtener una crema suave y homogénea. Incorpora los huevos uno a uno, mezclando bien después de cada adición.
Paso 3: Horneado
Vierte la mezcla de queso sobre la base de galletas y extiéndela de manera uniforme. Hornea a una temperatura baja durante aproximadamente 45-50 minutos, o hasta que la tarta esté dorada y firme al tacto.
Consejos y Trucos
Elección del Queso Crema:
Para un sabor más suave, puedes optar por queso crema tipo Philadelphia. Si prefieres un toque ácido, el queso mascarpone puede ser una excelente alternativa.
Decoración Creativa:
Una vez horneada y enfriada, puedes decorar la tarta con frutas frescas, salsa de caramelo o chocolate derretido para agregar un toque personal y colorido.
¿Puedo hacer esta tarta sin horno?
Sí, puedes preparar una versión sin horno utilizando una mezcla de galletas trituradas y mantequilla como base y refrigerando el relleno en lugar de hornearlo.
¿Se puede congelar la tarta de queso?
Sí, puedes congelar porciones individuales de la tarta envueltas en papel film para disfrutar en otro momento. Al descongelar, asegúrate de hacerlo lentamente en la nevera para mantener la textura original.